El Mensajero

Columnas noviembre de 2022

El revuelo que levanta la reunión de cabina vehicular, entre el ex gobernador Eduardo Bours Castelo y el gobernador Alfonso Durazo Montaño, sigue de pronóstico reservado.

Ni aún los más asertivos análisis políticos indicaban que, previo a ese “raite” gubernamental, existiera entre ellos dos una relación política.

Porque, vamos, nadie va a creer que esa reunión en la cabina de la camioneta del ex mandatario, fue imprevista, así como que se encontraron por casualidad, y uno le dijo al otro que no tenía como llegar al aeropuerto, y el otro le dijo, no te fijes, yo te llevo.

Está claro y entendido que, la estrategia, cien por ciento mediática, era exhibir públicamente que Eduardo Bours y su capital político, ya forma parte de la 4T sonorense, y que si ahora los dos se montaban en el mismo vehículo, es porque antes, ya habían dialogado, coordinado, acordado, negociado, pactado, y comprometido, la cantidad que usted quiera dictar de acciones políticas en conjunto.

Pero, a ver, ¿porque el escándalo? Para empezar, al ex gobernador no lo persiguen, salvo el caso de la Guardería ABC, fantasmas del pasado, ni denuncias penales en su contra, ni expedientes abiertos, ni procesos por juzgarse. ¿Recuerdan cuantas veces Alfonso Durazo ha dicho que, mientras nada de eso pese sobre la cabeza de alguien, su aportación positiva al estado será bienvenida? Pues, este es un ejemplo.

Ahora, el tema de la guardería, y siendo harto fríos en estas líneas, la responsabilidad que se le endilga al cajemense es meramente social y moral, porque jurídicamente, no hay nada. En ese sentido, el Movimiento 5 de Junio, conformado por los padres y deudos de ese tragedia del 2009, fue desinflándose justamente por el destino que cada padre y madre tomó respecto a su lucha, cuya última gota derramando el vaso, fue la incorporación de Patricia Duarte, su principal activo, al actual gobierno estatal. Por eso, que hoy se trate de desvirtuar esa reunión de cabina, entre los dos mandatarios estatales, en relación a lo que Bours hizo o no por la guardería, está fuera de contexto. ¿Se critica la reunión entre los dos políticos? Entonces, tendremos que criticar la incorporación en nómina estatal o federal, de los padres deudos de esta tragedia.

Entonces, ¿qué es lo que está reunión representa, sin tomar en cuenta a la guardería ABC?

Es muy sencillo entenderlo, y le explico con esto: Alfonso Durazo Montaño, en su calidad de aspirante primero, y candidato después, repitió al cansancio que su gobierno se caracterizaría por ser uno de alta gama, de resultados probos, y en apego a la política pública que él impondría en su sexenio, y ojo con esto, que no le dolería la mano para tomar decisiones, por más fuertes que fuesen, en beneficio y a favor de los sonorenses.

En segundo término, en solo un año de gobierno durazista, el contexto político ha cambiado diametralmente, en varias aristas, primero, en el tema presupuestal, y segundo e igual de importante, en el de seguridad, entre otras que tendrían que verse una a una, y por separado. 

En este momento, en el gobierno estatal actual, se observan claramente acciones emergentes para suplir la falta de dineros del presupuesto federal a Sonora, y los niveles de inseguridad, que agotaron ya la paciencia de la autoridad estatal en general, los estarían obligando a tomar acciones urgentes y emergentes en este mismo sentido, y que iremos viendo a lo largo del 2023.

Ante eso, y retomando el tema, ¿porque se dejaron ver, públicamente juntos, Eduardo y Alfonso? Porque en el transcurso de este último mes de 2022, y el primer trimestre del 2023, cuadros políticos relacionados al boursismo, empezarán a operar directa o indirectamente en el gobierno durazista. Eso está más que claro, y aquí la apuesta es ir determinando que cuadros son los que se pintarán ahora de Morena.

Y quiero subrayar esto, está integración paulatina no significa que, Alfonso Durazo, vaya a entregar el control del estado, de ninguna manera, a grupos políticos ajenos a él, significa sólo que se ve obligado a reforzar alguna áreas con personajes con experiencia probada en estas, particularmente las operativas en seguridad y hacendarias. 

Y aquí es tiempo de recordarle a usted un suceso histórico, y es que cuando Alfonso Durazo luchaba con la decisión de separarse de Vicente Fox y su fallida política nacional, fue Eduardo Bours, entonces gobernador de Sonora, quien lo apoyó moralmente, y quien lo recibió en Sonora, con parabienes políticos, luego de tomada esa decisión por el ahora gobernador sonorense. Hay compromiso y entendimiento moral, pues, entre los dos.

Ante todo eso, la reunión multi citada arriba, no tiene nada de raro, ni de espectacular, y mucho menos, de características fuera de orden.

Habrá quienes en adelante, muestren discordancia y desacuerdo con esta, pero eso es solo porque tendrán que poner sus barbar a remojar. 

Por último, y lo que podría preocupar al gobierno estatal, es la posible re activación del movimiento que encabezó, siempre, Patricia Duarte. Estamos en el umbral de nuevas manifestaciones públicas, de bloqueos y marchas, y plantones frente a Palacio de Gobierno. Aquí lo disruptivo será ver con que tanta fuerza moral o social regresan, luego de haber formado parte de la nómina estatal. Ya lo iremos viendo.

Puntualizando: la reunión Durazo/Bours es el colofón de reuniones previas que nunca conocimos, cuadros políticos boursistas pasarán a ser durazistas, el gobierno estatal no reparará en implementar medidas emergentes para mejorar su operatividad, y el gobernador Durazo Montaño cumple su palabra, al no conceder protección ni privilegios a quien no dé resultados. 

No fue una reunión de último momento, claro que no lo fue.

Redacción de Gilberto “mensajero” Armenta

@mensajero34

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